Por Enrique Gómez
Un clásico de CONCACAF muy extraño, pero que el Tri debe aprovechar
Tres partidos oficiales seguidos sin ganarle a Estados Unidos… la buena noticia para el Tri es que el duelo de esta noche es todo menos formal, en realidad es el clásico de CONCACAF más improvisado de todos.
Ya sin esa presión y con los dos equipos desprovistos de sus figuras ‘europeas’, ¿México podrá volverle a ganar a Estados Unidos por primera vez desde 2019? La victoria de hace casi cuatro años fue la última del equipo ‘azteca’ ante su archirrival y justamente se dio en un partido amistoso, como el de ahora.
Gracias a que este partido está fuera del amparo de Fecha FIFA, ambos equipos se llenaron de futbolistas de sus ligas locales y es por eso que la plantilla del Tri es más valiosa que la de Estados Unidos (105 millones de euros contra 83), aunque ya para el duelo del 15 de junio por la Liga de Naciones de CONCACAF la cosa será muy diferente, cuando las ‘huestes europeas’ configuren ambos bandos.
Pero sin importar la calidad de estas plantillas, oficialmente se trata de un duelo entre los equipos mayores de México y Estados Unidos, por lo que el Tri puede aprovechar este juego atípico para quitarse el dominio del archirrival y de paso probar esa línea de cinco que propone Diego Cocca, así como a los nuevos jugadores que fueron citados y que buscan ganarse un lugar en el proyecto.
Será extraño ver a Roberto de la Rosa como centro delantero titular en un clásico de CONCACAF, pero con la lesión de Henry Martín, es lo que hay; en tanto, por Estados Unidos seguramente aparecerá Brandon Vázquez, quien hace un par de torneos estuvo muy cerca de reforzar a Chivas.
México y Estados Unidos desplegarán un equipo alternativo, a la espera de que estos jugadores se conviertan en seleccionados estelares al futuro. Será interesante ver quién lleva la delantera en el porvenir.
Llegó el cambio: Un Tri muy joven y con línea de 5 ante Estados Unidos
