Sergio Ramos se ha convertido en el gran héroe de Rayados de Monterrey, luego de haber marcado el gol que le permitió al equipo de la Liga MX, debutar con empate en el Mundial de Clubes ante el Inter.

Horas después de su gran exhibición con el equipo mexicano, el exjugador del Real Madrid y del PSG fue invitado por Los Angeles Dodgers para lanzar la primera bola en el duelo ante San Diego Padres.

El defensa español terminó siendo el amuleto de la suerte, pues Los Dodgers terminaron por imponerse 4-3 con un Home Run en la novena entrada para ganar la serie ante su rival de la misma ciudad.

Ramos demostró buena potencia de brazo desde La Lomita en el envío que tuvo como destinatario al puertorriqueño Enrique Hernández, con quien terminó intercambiando camiseta por camisola.

Rayados  ya está en Los Angeles, ciudad donde disputará su segundo partido de la fase de grupos en el Mundial de Clubes donde se medirá a River Plate, virtual líder del grupo E.