Por Karla Villegas Gama
El argentino apareció con una casaca mientras se definía el rumbo del partido ante Brasil
Como si la irrupción de un grupo de representantes de la Agencia Brasileña de Regulación Sanitaria al arranque del partido en la Arena de Sao Paulo no fuera sorpresivo, ver a Lionel Messi con una casaca de fotógrafo seguramente completó el cuadro.
El capitán de Argentina se retiró a los vestidores ataviado con el uniforme de la ‘Albiceleste’ pero al volver, para tratar de dialogar con las autoridades, llevaba una pechera en lugar del característico ‘10’, ¿por qué?
Resulta que, en medio de la confusión, los jugadores de ambos equipos se fueron a los túneles, ahí, Dani Alves, que había salido a la banca con la ‘Canarinha’, le pidió a su excompañero del Barcelona que intercambiara jersey con él; Messi no lo dudó ni un instante y se quedó con la playera número 13 del defensa brasileño.
Sin embargo, con lo que la ‘Pulga’ no contaba era con que regresaría al campo y eso significaba que no podía estar con el dorso descubierto, pues el reglamento establece que, de ser así, el jugador será acreedor a una amonestación.
Ante esta situación, decidió pedirle al fotógrafo de la Selección Argentina, Tato Pagano, su pechera para evitar una tarjeta amarilla ante todo el caos que ya se vivía en el terreno de juego.