Por Héctor Cantú
El argentino habló sin tapujos de su salida del Barcelona y su llegada a París
Ha terminado una temporada más en el futbol europeo. Un ciclo donde, por primera vez, Lionel Messi cambió de colores, forzado un poco por el Barcelona, el club de sus amores, quien vio imposible mantenerlo ante la inestabilidad de sus finanzas.
Leo emprendió el viaje hacia el Paris Sait Germain, donde no tuvo el brillo esperado, un escenario que hasta cierto punto era predecible y que ahora, el propio Leo ha confirmado: él no estaba preparado para un cambio de aires.
En una entrevista ofrecida para la televisión argentina, el exjugador del Barcelona confesó que su transición a la Ciudad Luz fue un reto complicado, sobre todo por la adaptación, y porque él no quería vivir esa experiencia.
“Tenía pensado que todo sería de la misma manera, en el Barcelona, como toda mi vida y en el medio pasó todo lo que pasó. Fue duro, un cambio duro, un año difícil porque no fue fácil la adaptación. Después de toda la vida estar en un mismo lugar, porque una cosa es hacerlo queriendo o más joven y yo en ese momento no lo quería. Fue un año difícil”, detalló.
En la misma entrevista, La Pulga confesó que la decisión del Barcelona llegó a lastimar y trastocar un momento de felicidad completa que días antes había vivido con la Selección de Argentina tras conquistar la Copa América.
Su salida del club terminó con una racha de positivismo y buenas sensaciones para llevarlo a buscar brillar en un club que en un ciclo más quedó atascado en el fracaso luego de haber sido eliminado en los cuartos de final de la Champions League, a pesar de contar con una plantilla basta y muy cara.
En la temporada que recién terminó en Francia, Lionel Messi vio actividad solo en 34 partidos, donde solo sumó 11 anotaciones, una de sus peores rachas en toda su carrera.