Cruz Azul se ha convertido en campeón de la Concacaf por séptima ocasión en su historia, igualando así los títulos que lucen en las vitrinas del América, segundo máximo ganador de este certamen.

Pero lo más inexplicable del título de Cruz Azul es que la continuidad del técnico Vicente Sánchez no esté asegurada para los próximos años después del gran semestre que logró.

Bajo el mando del uruguayo Cruz Azul llegó a la Liguilla, y se coronó en la Concacaf Champions Cup. Logró un registro de 17 victorias y solo 2 derrotas números que, en otros equipos y bajo otros ojos, valdrían el boleto para la continuidad de un proyecto que a todas luces ha sido exitoso.

Pero Cruz Azul ha demostrado que no siempre se toman las mejores decisiones desde la cúpula del equipo. Que aunque los jugadores han declarado y demostrado que, con Vicente, se ha creado una familia, ninguno tiene la seguridad de continuar.

“El valor lo dan los números. Son ellos los que hablan por sí solos. Este semestre que hicimos y que me tocó comandar, creo que los números hablan por sí solos. Agradecido con Dios por darle la copa a los aficionados”, detalló el entrenador en conferencia de prensa.

Hasta el momento, la directiva no ha confirmado si Vicente Sánchez se quedará en el banquillo al que llegó como técnico suplente.

Los rumores apuntan a una intempestiva e inexplicable salida del uruguayo para dejar el sitio a Guillermo Almada, quien recientemente dejó a los ‘Tuzos’ del Pachuca.