Por Héctor Cantú
El equipo culé logró una goleada por demás importante a uno de sus acérrimos rivales
El Barcelona terminó finalmente con la hegemonía del Bayern Munich tras golear 4-1 al Bayern Munich, un resultado que resulta en un tanque de oxígeno para los comandados por Hansi Flick.
Raphinha y Robert Lewandowski fueron los hombres que finiquitaron nueve años de dominio total del gigante de Bavaria en competiciones oficiales.
A su lado, también brillaron Lamine Yamal, Marc Casadó, Pedri y Cubarsí, futbolistas de la Masía en los que recae el futuro del equipo culé que intenta recuperar terreno perdido en las competiciones más importantes del mundo.
Raphinha, capitán del Barcelona, fue el encargado de abrir el tanteador al quitarse, en el primer minuto de juego, al arquero Manuel Neuer para enviar la pelota al fondo de las redes.
Un descuido en la defensa, en el intento del Barcelona de mantener la presión alta, fue bien aprovechado por el Bayern Munich que encontró el empate en los pies de Harry Kane, despertando los viejos fantasmas del equipo español.
Pero después vendría el despertar del equipo local, alentado por su gente. Robert Lewandowski se encargó de devolver la ventaja a su equipo ante sus excompañeros con una gran definición a pase de Lamine Yamal.
Después, vendría el show de Raphinha, quien marcó el tercer y cuarto gol con una efectividad descomunal. Primero, con un disparo de larga distancia y el tercero en su cuenta personal, bajando la pelota con el pecho, conduciendo y disparando, también desde las afueras del área.
Así, en un la noche de graduación de Raphinha, el Barcelona ha puesto punto final a una seguidilla de seis derrotas ante el Bayern Munich y de cuatro partidos sin poder marcar gol.