Espanyol soñó, pero despertó en Valencia con el descenso

Espanyol, después de empatar 2-2 contra Valencia en Mestalla, es matemáticamente equipo de segunda división a falta de una jornada para cerrar la temporada, ya que es penúltimo de la clasificación con 36 puntos y la permanencia la marca, actualmente, Celta con 40.

El cuadro catalán ha mantenido vivas sus opciones de salvación en este último tramo del curso tras la llegada de Luis García al banquillo con momentos épicos. La remontada contra el Atlético en la anterior jornada que pasó del 0-3 al 3-3 y el propio duelo frente a Valencia, ya que empezó perdiendo 1-0, son dos ejemplos claros.

Sin embargo, el déficit de puntos del equipo le ha condenado al descenso, el último partido de la campaña, contra Almería como local, no puede tener ningún efecto real en la clasificación y será simplemente una despedida amarga ante sus aficionados, que se han volcado con el equipo.

Espanyol vuelve a segunda, una categoría a la que ya bajó en el curso 2019-20, regresó a la élite tras ser campeón en la división de plata en la 2020-21. Los catalanes deberán diseñar una estrategia de plantilla para volver a la máxima división cuanto antes.