Mientras los ojos del mundo están puestos en el Mundial de Clubes y la Copa Oro que arrancará en los próximos días, en la Liga MX sigue ‘caliente’ el mercado de verano de cara al torneo Apertura 2025 que iniciará en julio próximo.

En los banquillos de la Liga MX está a punto de cocinarse dos movimientos extraños, que vuelven a dejar en claro que hay poco honor en los clubes del futbol mexicano.

El primer movimiento es la llegada de Nicolás Larcamón a Cruz Azul, flamante campeón de la Concacaf Champions Cup.

La Máquina habría cortado un proceso valioso en la figura de Vicente Sánchez, para reiniciar el camino con Nicolás Larcamón, estratega que dirigió durante el último semestre a los Rayos del Necaxa.

El contrato del argentino con el equipo de Aguascalientes estaba firmado hasta diciembre próximo, por lo que su repentina salida implicaría un pago por parte de Cruz Azul.

Ante este movimiento, Necaxa ha sondeado el mercado de técnicos disponibles y su apuesta sería la de regresar al futbol mexicano a Fernando Gago.

El problema para los Rayos del Necaxa, es que Gago llega con las peores credenciales posibles. Fracasó con Chivas, equipo al que dejó de la peor manera posible para iniciar un nuevo camino con Boca Juniors, club de su país del cual, también, salió por la puerta de atrás.

Fernando Gago no es bien visto por los directivos del futbol mexicano. Sus promesas de mantenerse con Chivas, mismas que no cumplió mientras negociaba su pase al equipo de sus amores, dejó muy mal parado al argentino en las cúpulas de los dirigentes.

Pero ahora, parece que Necaxa está dispuesto a correr el riesgo de darle otra oportunidad al protagonista de uno de los episodios más penosos de la historia reciente del futbol mexicano, mientras Cruz Azul, con la mano en la cintura, se deshace del técnico que los llevó a la gloria en la Concacaf.