Barcelona se juega la vida ante el Atlético de Madrid con el ánimo por los suelos. La prueba más complicada llega, justo, en el momento más complicado del equipo de la Ciudad Condal aún cuando se palpita que La Liga se les ha ido de las manos.El empate del sábado pasado ante el Celta de Vigo(2-2) hizo estallar la bomba en el vestidor, donde la plantilla le dio la espalda a Setién y su equipo de trabajo.Video | La previa de la jornada 33 Sin embargo, el domingo las cosas cambiaron. Una charla interna entre entrenador y jugadores, permitió cerrar filas para lo que resta del torneo, según ha revelado el diario Mundo Deportivo. El rotativo asegura que el malestar con Setién va dirigido a su permisivismo y pasividad ante el rol protagónico que ha tomado Eder Saravia. A algunos futbolistas no les gusta esta posición y la tranquilidad de Setién en el banquillo.Jugadores y cuerpo técnico se habrían hablado claramente y a la cara para cerrar filas con el proyecto de Setién, quien al menos, terminaría La Liga esperando que haya un batacazo del Real Madrid que les permita recuperar el liderato de la tabla.